Sobre los beneficios que aportan los frutos secos a la dietas se ha hablado mucho, y lo cierto es que merece la pena tenerlo en cuenta e incluirlos en la dieta. Podemos hacerlo de distintas formas, una de ellas es elaborando cremas para untar, como la clásica mantequilla de cacahuete. Lo cierto es que con el boom de la alimentación saludable y sobre todo con la tendencia de la alimentación fit, las cremas de frutos secos son uno de los productos que han visto crecer su consumo.
Ahora bien, no valen todos, pues los hay que incorporan azúcar, otros añaden otras grasas… por lo que lo mejor es hacer la mantequilla de almendras casera, es tan fácil… No es la primera crema o mantequilla de frutos secos cuya receta hemos compartido con vosotros, recordad por ejemplo la mantequilla de nueces. El caso es que hoy teníamos un excedente de almendra molida que queríamos gastar y este ha sido su destino.
Hay que decir que si se tienen que comprar las almendras para hacer esta mantequilla, recomendamos comprarlas enteras, pues conservan mucho más sabor, pero si como nosotros, tenéis que gastar lo que tenéis en la despensa, adelante. Os vamos a explicar cómo hacer mantequilla de almendras con almendra molida, veréis que el tiempo de preparación es muy corto. En el caso de utilizar almendra entera el tiempo para conseguir la mantequilla aumentará lógicamente, pero tampoco es mucho tiempo, unos diez minutos quizá. Podéis seguir las instrucciones y explicaciones que os dábamos en la receta de mantequilla de nueces, y si lo preferís, dejadnos en los comentarios que preparemos esta misma mantequilla con las almendras enteras y lo haremos, porque la gastamos con mucho gusto.
Esta mantequilla se puede utilizar para muchas recetas, por ejemplo para unas galletas, un pastel, un smoothie, una crema… y claro, también se puede disfrutar untándola sobre una tostada. Nosotros hemos hecho la mantequilla sin adicionarla con nada, porque así podremos darle más usos, pero si queréis podéis endulzarla a vuestro gusto, también podéis aromatizarla con un poco de vainilla, canela, cardamomo… es tan sencillo como incorporar lo que deseéis en el momento de triturar.
Ingredientes
500 gramos de almendra molida, extracto de vainilla (opcional), endulzante al gusto (opcional), una pizca de sal (opcional).
Elaboración
Las almendras molidas se deben tostar y se puede hacer en el horno, extendiéndolas en la bandeja y a unos 180º C y moviéndola de vez en cuando, hasta que veamos que está algo más dorada y desprende el aroma característico.
También se puede hacer en una sartén grande (en una o dos veces), para lo que hay que tener más cuidado y paciencia. Se debe poner a fuego medio y no dejar de remover. Una vez que la harina de almendra está tostada, pásala directamente al vaso de la Thermomix o de la procesadora de alimentos que utilices.
En Thermomix, a velocidad 6, hemos obtenido la mantequilla en menos de 30 segundos (es la primera vez que hacemos la mantequilla partiendo de la almendra molida, y no nos esperábamos que estuviera lista tan pronto. Claro, que lo facilita que estuviera aún caliente, y hay que tener mucha precaución de no batir en exceso y que se separe la grasa de la parte sólida de la almendra. También es cierto que según cuanto se triture puede quedar más o menos densa, más o menos untable, pues se habrá extraído más o menos grasa del fruto seco.
Si se quiere triturar más para que sea una pasta más ligera, que no sea a una velocidad muy elevada. En otro robot de cocina o procesador tendréis que valorar vosotros el tiempo que tarda, si queréis dejarlo en los comentarios, seguramente ayudará a otras personas que quieran hacer esta pasta de almendra.
Una vez hecha la mantequilla de almendra, pásala a un recipiente con tapa hermética, pero no la cierres hasta que se enfríe. Después, como es una mantequilla totalmente natural, nosotros preferimos guardarla en el frigorífico para una mayor conservación.
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