El próximo día 1 de junio se celebrará la Gala de la Lista de los 50 Mejores Restaurantes del Mundo 2015, en esta ocasión se cumple la décimo cuarta edición de la clasificación patrocinada por S. Pellegrino & Acqua Panna. Como sabemos, hay quien no está de acuerdo con los criterios de selección o los resultados que arroja la lista, críticas que hemos podido conocer cada año a través de artículos en periódicos o a través de las redes sociales. Pues bien, ahora se ha lanzado una petición contra la Lista de los 50 Mejores Restaurantes del Mundo, se trata de una acción promovida por un blogger, un periodista y el dueño de una agencia de relaciones públicas.
La petición se denomina Occupy 50 Best y realiza un llamamiento a los patrocinadores de la lista para que dejen de apoyarla económicamente al considerar que se trata de una lista opaca, sexista y arrogante que tiene dudosa credibilidad. Los responsables de esta petición afirman que la lista pone de manifiesto que se antepone el nacionalismo culinario a la calidad, permitiendo que los chefs estén por encima de los problemas de salud o la satisfacción de los comensales.
Se lanzan preguntas como ¿qué tienen en común restaurantes como Noma, The Fat Duck o el Bulli (antes de que finalizara su actividad como restaurante)? Todos han sido coronados como Mejor Restaurante del Mundo, pero también “han intoxicado a cientos de clientes”, en los dos primeros restaurantes por intoxicación por norovirus y en el caso de elBulli por utilizar productos químicos peligrosos, afirmación más que cuestionable.
Se realiza la petición asegurando que la lista no se basa en criterios gastronómicos, deontológicos o sanitarios. Se critica que los miembros del jurado no tienen por qué justificar sus votos y no proporcionan pruebas que demuestren que han pisado el restaurante que han votado, por ello consideran que no hay transparencia en el proceso. Al respecto merece la pena retomar la lectura de este post, en él hablábamos sobre las normas que permiten elegir y configurar la lista de los mejores restaurantes del mundo.
Según los responsables de la petición Occupy 50 Best, la lista es una clasificación que no es imparcial, los países socios tienen mayor peso, aseguran que los chefs la utilizan para la autopromoción dado que algunos de los miembros del jurado son cocineros y además sus establecimientos están en el listado. Consideran que la lista es sexista porque en la clasificación apenas aparecen cocineras, aseguran que el listado pretende sacudir los paradigmas de la alta cocina, existe exceso de comercialización, promoción de los cocineros, se da preferencia a ingredientes innovadores, etc.
En la petición se asegura que muchos chefs están disgustados con el sistema y métodos que se llevan a cabo para la elección de los mejores restaurantes, por ello decidieron boicotear la lista con el riesgo de perder cierta notoriedad, invitan a que todo el mundo siga el ejemplo de estos chefs y firmen esta petición para que los patrocinadores dejen de financiar lo que consideran una pantomima.
Lamentablemente, para los creadores de esta petición, hasta el momento sólo han firmado 137 personas, tres más que cuando esta página se hizo eco de la petición, por lo que les deja en evidencia al asegurar que muchas personas están en contra de la lista. Por otro lado, el hecho de que la petición parta de Francia ya es sospechoso, recordemos que es el país cuna de la Guía Michelin, y el país que no logra alcanzar los primeros puestos en la clasificación. En el año 2011 sólo un restaurante francés (Le Chateaubriand de Iñaki Azpitarte) estaba entre los 10 mejores, en 2012, 2013 y 2014 no aparece ningún restaurante del país galo entre los 10 primeros puestos.
Es cierto que es posible que haya que cambiar algunas cosas en esta lista de restaurantes, de hecho, poco a poco se introducen novedades y cambios, la organización fue consciente de la falta de notoriedad de las cocineras en la lista y por ello se creó el premio a la mejor chef femenina, las reglas sobre la elección de los restaurantes se han ido puliendo poco a poco. Por ejemplo, si accedemos a la página de The World’s 50 Best y concretamente al manifiesto, podemos leer que Deloitte, empresa que ofrece servicios de consultoría, impuestos, asesoría jurídica, asesoría financiera y auditoría, se encarga de supervisar todo el proceso para confirmar la integridad, autenticidad de las votaciones y la lista resultante.
A través de este enlace podréis acceder a la página Occupy 50 Best y conocer más detalles sobre la solicitud que se realiza.
Petición contra la Lista de los 50 Mejores Restaurantes del Mundo
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