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miércoles, 30 de noviembre de 2016

Mafaldine de tomate con burrata y nueces

Mafaldine de tomate con burrata y nueces

La pasta mafaldine es muy llamativa por su forma y tamaño, además ofrece una textura muy agradable, siendo ideal para la receta que hoy compartimos con vosotros, se trata de Mafaldine de tomate con burrata y nueces, un plato que encantará a los amantes de la pasta y que podéis hacer cualquier día de la semana, pues no hace falta más de media hora para tenerlo en la mesa.

De todas formas, si no encontráis mafaldine de tomate, podéis probar con otro tipo de pasta similar, o la que sea de vuestro agrado. Otras variantes que podéis aplicar a esta receta son cambiar las nueces por piñones, aromatizar con albahaca en lugar de orégano (o con ambas hierbas aromáticas), e incluso añadir unos taquitos de jamón. Os dejamos con la receta de pasta con burrata, tomates secos y nueces, y esperamos que nos comentéis qué os parece cuando la probéis.

Ingredientes (4 comensales)

350-400 gramos de mafaldine de tomate, 2 dientes de ajo, 100-120 gramos de tomate seco en aceite, 8 nueces, 1 c/s de orégano, 2 piezas de burrata, c/n de sal, c/n de aceite de oliva virgen extra.

Elaboración

Pon una olla con abundante agua a calentar para cocer la pasta. Cuando rompa a hervir, añade sal y a continuación los mafaldine de tomate. Cuece la pasta el tiempo que indique el paquete, o hasta que esté al dente.

Mientras tanto prepara el aderezo, pela los dientes de ajo y córtalos en láminas, escurre los tomates secos y córtalos en tiras finas, casca las nueces y trocéalas no muy pequeñas.

Pon un poco de aceite de los tomates en la sartén y otro poco de aceite de oliva virgen extra en la sartén y sofríe a temperatura media, los tomates con los ajos y las nueces, añade una pizca de sal (opcional) y el orégano. Deja que los ajitos y los tomates se doren al gusto, pudiendo dejarlos ligeramente crujientes.

Mafaldine de tomate con burrata y nueces

Cuando la pasta esté hecha, escúrrela y aderézala con un poco de aceite de oliva virgen extra y orégano, y procede a servirla en los platos.

Corta cada burrata en dos mitades con cuidado de que el queso se mantenga en el interior de su piel.

Acabado y presentación

Sirve sobre la pasta de tomate la porción de burrata correspondiente, a continuación reparte el sofrito de tomate seco, ajos y nueces, y si fuera necesario, añade un hilo de aceite de oliva virgen extra. ¡Buen provecho!

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