Este fin de semana hemos descorchado una botella de vino que teníamos desde hacía tiempo en nuestra pequeña bodega, y os vamos a hablar de él principalmente porque para algunos aficionados o apasionados por el mundo del vino puede ser de interés por el sistema de concepción de la bodega. En la foto podéis ver el vino ecológico Dionisos Vinum Vitae, un Vino de la Tierra de Castilla elaborado por Bodegas Dionisos, también conocida como La Bodega de las Estrellas.
Sobre esta bodega os hablamos hace un tiempo, cuando catamos otro de sus vinos, hablamos del Flor de Rocío y podéis recordarlo en este post. Entonces ya os comentamos que Dionisos es una bodega con más de 200 años de antigüedad, cuando en Valdepeñas llegaron a haber 500 bodegas tradicionales, una casa solariega y una bodega en el centro de la ciudad, pero parece que ahora es la única que queda.
Ahora la bodega la lleva la cuarta generación de la familia, una familia comprometida con el planeta, pues considera que el cultivo de la viña y la elaboración del vino deben estar en armonía con la Tierra y con quienes habitan en ella. No tienen grandes producciones de vino, entienden la elaboración de este zumo de uva como una parte de alquimia, por lo que la instalación tradicional de la bodega pone en valor la elaboración y conservación de vino en tinajas, en una cueva, y es su seña de identidad.
La Bodega Dionisos elabora vinos naturales, y una de sus gamas es la de los vinos ‘Al Compás de la Luna’, como este Dionisos Vinum Vitae 100% Tempranillo. Cuentan que estos vinos se han hecho con el Calendario Cósmico, o sea, que los tanto distintos trabajos que se realizan en la viña como los que se realizan después en bodega, se han hecho en los días en los que la Luna estaba ante las constelaciones que refuerzan cada una de las cualidades esenciales.
Afirman conseguir que los vinos ‘Al Compás de la Luna’ integren las cualidades de los cuatro elementos, de hecho, así les llaman ahora (la etiqueta ha cambiado), además recomienda unos días concretos para descorcharlo según la influencia de su elemento. El vino Dionisos Vinum Vitae es el vino Dionisos Tierra, un vino que huele y sabe a terruño. Y esto último cierto es.
La uva procede del viñedo El Corcobillo, tiene más de 80 años y está terreno con ligera pendiente norte y suelos rojos arcillosos y calcíticos. Se vendimia a mano en septiembre y se fermenta en tinajas con su propia levadura. La fermentación maloláctica se produce en tinajas de barro y la crianza se realiza en barricas de roble francés durante once meses.
No sabemos si coincidiendo con el calendario de catas de la bodega, pero abrimos este vino que disfrutamos acompañando una carne asada al horno, y es que es un vino potente, ideal para este tipo de platos. Es un vino de color granate oscuro, de sus aromas extraemos minerales, tierra mojada, notas tostadas y algo de cuero, y en boca es un vino de paso ligero, de cuerpo medio, con taninos maduros, equilibrado y sabroso.
Si queréis sorprender a alguien con un vino producido al compás de la luna o con un vino ecológico con estas características, os interesará saber que su precio en bodega es de 15 euros, pero también lo podréis encontrar en tiendas especializadas. Si queréis conocer más detalles sobre la bodega, podéis acceder a ella a través de este enlace.
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